El Tri abre su participación en el Preolímpico con una victoria de 7-1 sobre Trinidad y Tobago
CARSON, Estados Unidos. Mar. 23, 2012.- Con lujo de facilidad, pero con algunos problemas en la definición al inicio del partido, pese a los siete goles, el Tri se impuso a un equipo de Trinidad y Tobago que no es parámetro para medir las posibilidades mexicanas en el Preolímpico de la Concacaf.
Es cierto, mantuvo el mismo ritmo los 90 minutos y los hombres que deben pesar en el equipo, Marco Fabián, Alan Pulido, Diego Reyes, lo hicieron, pero los caribeños más propensos al Tae Kwon Do que a tratar bien el balón, nunca supusieron un real peligro para los hombres de Luis Fernando Tena.
Sin embargo, debieron de hacer un trabajo de erosión y desgaste ante un juego muy físico y extremadamente rudo de los caribeños.
Tanto así que México debió terminar el partido con 10 hombres porque Néstor Calderón no pudo continuar en el campo por un golpe y no había ya más cambios, pero sentidos por el maltrato del rival también están David Cabrera, Javier Aquino, Javier Cortés y Alan Pulido.
Los goles del encuentro fueron obra de Marco Fabián (3), Pulido, Diego Reyes, Israel Jiménez y Cortés.
El Tri fue dueño del partido y de las oportunidades de anotar. Incluso, su dominio fue tal que cobró 10 tiros de esquina en la primera mitad, sin embargo sólo hasta el noveno marcó el primer tanto.
Cabrera cobró un tiro de esquina por derecha, Reyes peinó y Fabián saltó con el arquero estorbándole, el balón quedó suelto y Pulido anotó a los 29 minutos. Fue el punto de quiebre.
Dos minutos después, Ponce centró por izquierda y Fabián cerró con un remate de cabeza para el segundo tanto.
Para seguir con aquello del dominio mexicano, Trinidad y Tobago únicamente tuvo una llega al arco de Liborio Sánchez en la primera mitad.
A los 42', los caribeños armaron su primera jugada y De Silva tiró al arco de Liborio, sólo tuvieron una más en la segunda mitad en un disparo también controlado por Liborio.
Ya en la segunda parte, no hubo mayor cambio en la actitud de los dos conjuntos: México salió a la búsqueda de goles y consiguió cinco más de todas las manufacturas, mientras Trinidad aguantó lo que pudo, que no fue mucho.
Sin embargo, el Tri no cuidó, antes que de los embates futbolísticos del rival que fueron muy pocos, las patadas siniestras que repartieron los trinitarios y, quizá, la factura por la victoria, por los golpeados y lesionados que quedaron, sea demasido cara.
